«…Un guardaislas me dijo que
cuando el brujillo se pone a cantar es porque vendrá visita…»
Era fines de julio y hacía un inusual frío en la playa de
Atenas[i],
no obstante, era el último día en el que pasaría la noche antes de hacer una
pasantía en el Leibniz-Zentrum für Marine Tropenforschung[ii],
en Alemania. Sabía que iba a tener un especial significado esa última noche,
como la última noche con la persona amada que tiene un soldado antes de ir a la
guerra… pero claro, yo no iría a ni una guerra ni nada por el estilo, iba a
hacer ciencia en Alemania, dejando en alto el nombre del Perú.
Después de aquella noche en la que no pude dormir por
haberme quedado apreciando la belleza de Atenas, fui por un café en la caseta
de investigación. Al salir, percibí los primeros haces de luz del día e
inmediatamente decidí tomar unas últimas muestras, pero me vi abordado por un
extraño sujeto.
—Tú debes de ser Armando, ¿no?
—Sí, soy yo. Armando, un placer.
—Armando un placer jejeje —se río el extraño sujeto.
—¿Qué le causa gracia? —pregunté, ya sabía de qué reía.
—No, no es nada jejeje, vengo de parte del “diablo” Chacón, que
dice que quiere verlo.
—Ah, claro, le había prestado unas cosas…
—Sígame.
Después de seguirlo por unos minutos por la orilla del mar,
vi como unos pájaros muy curiosos se peleaban por comer a una malagua que
estaba en las piedras
—¿Le llama la atención, ingeniero? —preguntó el extraño
sujeto, con un extraño brillo en los ojos.
—Sí, nunca había visto pelear a tantas aves por una malagua.
—No son cualquier ave, míster. Son brujillos.
—¿Brujillos? Primera vez que escucho de esas aves —si bien
es cierto, yo no sabía mucho de aves, y me alegró saber cómo se llamaban
aquellas aves tan curiosas.
—Así es, ¿sabe por qué le dicen brujillos, míster?
—No, no sé por qué le dicen brujillos a esas aves, mi
estimado —no me respondió.
—¿Sabía que los brujillos se alteran y se ponen como locos
cuando “la mar” se va a poner brava?
—No, no sabía que los brujillos se alteraban y se ponían
como locos cuando “la mar” se iba a poner brava.
—¿Sabía que los brujillos cantan cuando alguien desconocido
viene por acá?
Ya me estaba cansando de los “sabía” de este extraño tipo
quien nunca me dijo su nombre y tampoco respondía a mis preguntas, pero qué me
quedaba… paciencia…
—No, no sabía que los brujillos cantaban cuando alguien
desconocido venía por acá a Atenas.
—¿Usted sabe quién soy?
—Justo eso le pregunté en el camino, señor. Hace muchas
preguntas usted —una risa forzada que sonaba como un gruñido nervioso.
—Señor Armando, ¿usted sabe que está hablando con un
brujillo?
—¡¿Qué?!
—Señor Armando, ¿usted sabe que también los brujillos hablan
con la persona que está a punto de morir?
Eusoj Sargav
[i]
Playa de Atenas, ubicada en la bahía de Paracas, la cual queda en la Reserva
Nacional de Paracas, distrito de Pisco, Ica, Perú, es un lugar propicio para el
cultivo de conchas de abanico.
[ii]
Leibniz-Zentrum für Marine Tropenforschung, es una escuela universitaria
ubicada en Bremen, Alemania, dedicada al monitoreo científico de los
ecosistemas marinos tropicales y los ambientes costeros tropicales en un
contexto biológico, ecológico y socioeconómico (Wikipedia).